El uruguayo Nicolás Cuestas hizo un gran esfuerzo para completar la maratón de Doha en el Mundial de Atletismo, finalizando la prueba en el puesto 55 con un tiempo de 2h40m05s.

La penúltima jornada del Campeonato Mundial de Atletismo en Doha (Qatar), concluyó con el maratón masculino. Y a diferencia de las otras pruebas realizadas en el mismo circuito -entre el centro y la costa- (maratón femenino y marcha) esta vez el clima no fue tan extenuante. Se corrió con 29°C de temperatura y una humedad vecina al 50%, lo cual permitió que los registros fueran un poco más aceptables que en las otras competiciones.

Los etíopes concretaron el 1-2 a través de sus dos cotizados representantes, Lelisa Desisa y Mosinet Geremew, con medalla de bronce para el keniata Amos Kipruto.

Sorpresivamente, el flamante campeón sudamericano Derlys Ayala (venía de imponer el récord nacional en el maratón de Buenos Aires), decidió participar aquí y lo hizo con un ritmo “endemoniado”, pasando en 46m34s los 15km y 1h02m38s los 20km, llegando a tener en cierto momento una ventaja de casi un minuto sobre el grupo de favoritos. Después, como se presumía, decidió retirarse, ya que acumulaba el trajín de tres maratones (Londres, Lima, Buenos Aires) en pocos meses.

A partir de allí, la carrera se concentró en pocos nombres. El que intentó llevar la iniciativa fue el eritreo Zersenay Tadese, quíntuple campeón mundial y ex recordman mundial de medio maratón. Le acompañaban Desisa, Geremew, Kipruto y el sudafricano Stephen Mokoka. Después del pasaje de los 30 km, Tadese no pudo sostener aquel ritmo y la lucha por las medallas se circunscribía a un grupo menor. No obstante, a la altura del km 40, apareció el británico Callum Hawkins decidido a pelear por el podio. Mokoka se retrasó, pero el esfuerzo de Hawkins sólo se sostuvo por un km. También Kipruto intentó alejarse, y no pudo.

Al ingresar al tramo definitorio, todo se redujo al duelo entre los etíopes, que esta vez favoreció a Desisa a partir de su último cambio de ritmo: terminó en 2h10m40s, con 4s de ventaja sobre Geremew, con Kipruto en 2h10m51s. El esfuerzo de Hawkins igual tuvo su recompensa con el cuarto lugar en 2h10m57s y Mokoka fue quinto con 2h11m09s. Tadese quedó 6° con 2h12m29s.

Algunos renombrados especialistas llegaron más retrasados. Entre ellos el keniata y defensor del título mundial Geoffry Kirui, ahora 14° con 2h13m54s. O el ex campeón olímpico (2012) y mundial (2013), el ugandés Stephen Kiprotich, ahora 18° con 2h15m04s.

El más experimentado entre los maratonistas sudamericanos, el brasileño Paulo Roberto de Almeida Paula, a sus 40 años tuvo un buen desempeño y fue 19° con 2h15m09s. Sus compatriotas Wellington Bezerra da Silva (2h21m49s) y Vagner da Silva Noronha (2h26m11s) quedaron 44° y 51° respectivamente. Y el bravo corredor uruguayo Nicolás Cuestas, pese a todas las dificultades, también completó el recorrido: 55° con 2h40m05s.

Lelisa Desisa, el flamante campeón, ya había sido subcampeón -detrás de Kiprotich- hace ocho años en Moscú. Cuenta con un registro personal de 2h04m45s en Dubai 2013 y en noviembre pasado había obtenido el maratón de Nueav York, mientras que este año fue segundo en Boston (2h07m59s) en la memorable definición con Lawrence Kiprotich.

Su compatriota Geremew -que en 2018 deslumbró en el 21k de Buenos Aires al bajar la hora- estaba con el cartel de favorito, tras su gran actuación en Londres, donde marcó 2h02m55s, por entonces segunda marca de la historia, escoltando al famoso Eliud Kipchoge. Ahora no pudo sostener el ataque en los últimos metros de Desias.